lunes, 22 de junio de 2009

viernes, 12 de junio de 2009

20 de junio Día de la Bandera

Algunas imagenes para el afiche





EL CRUCE DE LOS ANDES

San Martín,
bienvenido



En septiembre de 1814 el General José de San Martín fue designado por el Directorio como Gobernador Intendente de Cuyo. La región estaba formada por San Juan, San Luis y Mendoza y la sede del gobierno estaba en esta última.
La noticia fue muy bien recibida en todo Cuyo, cuyos pobladores veían en el militar una figura importante para defenderse de la posible invasión española desde Chile.
San Martín, por su parte, había pedido ocupar ese cargo porque ya tenía un plan para asegurar la independencia de América del Sur. Ese plan era cruzar la Cordillera de los Andes, liberar a Chile y después atacar por el mar a Perú, centro del poder español en Sudamérica.
En San Juan, en 1815 fue designado Teniente Gobernador el doctor José Ignacio de la Roza.



San Martín en 1812, dos años antes de hacerse
cargo de la Gobernación de Cuyo.
(Óleo de Alexander Clark - Pinacoteca del
Instituto Nacional Sanmartiniano)

Preparativos y aportes
En los planes de San Martín la región de Cuyo no sólo era importante por sus pasos cordilleranos; el aporte de estos pueblos era necesario para armar un ejército y prepararlo para el cruce.
San Martín organizó el Ejército de Los Andes en el campamento de El Plumerillo, en Mendoza. Allí se fabricaron cañones, sables, bayonetas y municiones. Para esto fue muy importante el aporte de todo Cuyo en la donación de objetos de metal, así como en el trabajo de herreros, hojalateros, armeros y talabarteros, muchos de los cuales viajaron desde San Juan para trabajar en el campamento principal.

Todo era necesario
Los pueblos cuyanos, entre ellos San Juan, aportaron oficiales y soldados, milicianos y arrieros, pólvora y víveres.
A pedido de San Martín, en San Juan el Teniente Gobernador de la Roza implementó impuestos a los vinos y aguardientes que se vendían fuera de la provincia con el fin de recaudar fondos.
Las mujeres sanjuaninas tejieron paños, donaron joyas y objetos de plata labrada, mientras todos los que podían entregaban dinero, caravanas, aguardiente y vino, pasas de uva, harina, trigo, maíz, jabón, aceitunas, mulas de silla y carga, caballos, cueros de vacuno, monturas, ponchos, barriles, toda la existencia de estaño e incluso esclavos negros. El año 1816 fue el de mayor esfuerzo para San Juan. El vecindario entregó todo lo que poseía y fue sometido a una contribución extraordinaria, mientras el Convento de Santo Domingo fue cedido para cuartel de las tropas.

San Martín
en San Juan

San Martín visitó San Juan en dos oportunidades: la primera en mayo de 1815, con el propósito de diluir intentos autonomistas en la provincia. La segunda, el 9 de julio del mismo año, para inspeccionar los pasos cordilleranos ante el peligro de una invasión realista desde Chile y para asegurarse el apoyo de la provincia a la campaña libertadora. En esta segunda visita -que se prolongó hasta el 27 de julio- se alojó en el Convento de Santo Domingo. La celda que ocupó ha sido declarada lugar histórico.




Un plan maestro
El plan de San Martín consistía en cruzar hacia Chile con seis columnas distintas. Cada una fue por un camino diferente, con el fin de confundir al enemigo. Cada columna tenía, además, objetivos claros de liberación de ciertas zonas en Chile. Todas partieron a mediados de enero de 1817 y demoraron aproximadamente 25 días en cruzar alturas superiores a los 4000 metros.
De las seis columnas, las dos principales -por la cantidad de efectivos y armamentos, así como por las misiones que tenían que cumplir- fueron las que avanzaron hacia Chile por el valle de Uspallata en Mendoza y por el valle de Los Patos Sur en San Juan.
La de Los Patos Sur fue la columna principal, constituida por el grueso del Ejército de Los Andes. Al mando del General José de San Martín, unos 5.000 hombres, más de 10.000 mulas y 1.200 caballos, además de cientos de vacas destinadas, marcharon, por el paso de Las Llaretas, hacia Chacabuco, donde se luchó la batalla definitiva, en febrero de 1817.
El mapa (que puede ser ampliado haciendo un clik sobre él) muestra las rutas que siguieron las seis columnas que cruzaron Los Andes.



La Columna Cabot
Durante los preparativos del Cruce de los Andes, el pueblo de San Juan se comprometió por intermedio de su Cabildo a formar un batallón de 500 soldados. Para ello se ordenó el reclutamiento voluntario y obligatorio de hombres. Sin embargo, el grueso de lo que sería la División Norte, al mando del Teniente Coronel Juan Manuel Cabot, se integró con voluntarios que se iban sumando al paso de la columna por parte del territorio sanjuanino. La expedición llevaba más de 1.500 animales y armamento.
El objetivo de esta columna era llegar a Coquimbo. Al igual que el resto de las columnas, esta que integraron chimberos, pocitanos, jachalleros e iglesianos a los que se sumó un importante número de chilenos, debía cumplir rigurosamente los plazos establecidos, para coincidir con la marcha del grueso del Ejército de Los Andes.
Cumpliendo las órdenes de San Martín, la columna partió de la ciudad de San Juan el 18 de enero de 1817. El primer gran obstáculo que tuvo que sortear fue el río San Juan, sobre el que no había puente y que estaba muy crecido ese verano.
La columna pasó por Las Tapiecitas, en Albardón, llegó a Talacasto y el 23 de enero acampó cinco días en Pismanta, reorganizando las fuerzas a las que se habían sumado numerosos voluntarios y confiscando ganado en pié que permitiera alimentar a la tropa que ya sumaba alrededor de 800 hombres.
Tal como lo había ordenado San Martín, la Columna Cabot cruzó Los Andes por los caminos más dificultosos, con el fin de evitar a los enemigos. Esa es la razón por la que esta división pasó a Chile a través del paso de Guana, a 5.000 metros sobre el nivel del mar, y no por el de Agua Negra, de menor dificultad.
El 12 de febrero las fuerzas de Cabot vencieron a los españoles en el combate de los Llanos de Salalá; y el 15 de febrero Cabot tomó Coquimbo y La Serena.

PARA LA FERIA DE CIENCIAS

NUEVO ENLACE AL SERVICIO METEOROLÓGICO NACIONAL: METEOFA

jueves, 11 de junio de 2009

NOVEDADES

Chicos, la Feria de Ciencias se realizará en la escuela el día 19 de junio. Como hay varios enfermos vamos a comunicarnos por mail, necesitamos que nos envíen las fotos que tengan y cuando vuelvan a clase traigan todo el material para la Feria.
En Sociales estamos trabajando con la vida de San Martín, les puse un enlace muy interesante sobre el Cruce de los Andes. También hay un enlace para ampliar el tema Estación Meteorológica.
Busquen en el blog que vamos a ir incorporando toda la información de lo trabajado en la semana.
Nos vemos.

domingo, 7 de junio de 2009

Estacion Meteorològica



Un poco de historia sobre la meteorología

La era precientífica:
La meteorología, como ciencia es relativamente joven si se la compara con las matemáticas y la astronomía, pero como parte de los intereses humanos se remonta a tiempos inmemoriales. Probablemente nunca se sabrá cuándo la humanidad empezó a formular reglas para predecir el tiempo. La forma de vida prehistórica, recolectora, cazadora, dependía de los caprichos del tiempo, es así como la gente fue desarrollando poco a poco una sensibilidad casi intuitiva para las condiciones atmosféricas. Nosotros, los hombres modernos, a quienes nuestro ambiente urbano nos separa de la naturaleza hemos perdido mucha de esa "intuición".
La antigua sabiduría sobre cuestiones de la naturaleza y concerniente a la regularidad de los ciclos celestes, base de los primeros calendarios, incluía los cambios cíclicos en la Tierra y llegó a correlacionarse con el estudio de los fenómenos naturales. Por ejemplo, en Mesopotamia el ciclo estacional estaba definido por observaciones astronómicas y meteoroloógicas. De igual forma, en Egipto, donde la prosperidad material ha dependido siempre de las crecidas y bajadas del Nilo, la aparición periódica de estrellas en determinadas constelaciones, como el nacimiento de Sirio, la Canícula, indicaba las fases cíclicas de inundación y sequía. En Egipto se hizo uno de los primeros y más famosos pronósticos a largo plazo cuando según el libro del Génesis, José interpretó un sueño del faraón como la llegada de siete años de hambre que serían seguidos por siete años de prosperidad: una profecía que muy bien podría haberse basado en el ciclo de 14 años descubierto por los sacerdotes-astrónomos egipcios para las crecidas del Nilo.
Nacimiento de la meteorología científica:
La revolución científica, uno de cuyos precursores fue Leonardo Da Vinci, liberó a la ciencia de sus represiones medievales. Se inauguró en 1543 con la publicación de la teoría heliocéntrica del sistema solar de Nicolás Copérnico. Poco a poco comenzó a cuestionarse el concepto de la predicción del tiempo basada en el movimiento de los cuerpos celestes y se fue aceptando que el ciclo anual de las estaciones era controlado por el movimiento de la tierra alrededor del sol. Las observaciones meteorológicas instrumentales comenzaron en el siglo XVII cuando, en el año 1600, Galileo Galilei inventó el termómetro y su discípulo Evangelista Torricelli, hizo lo propio con el barómetro en 1643. Los nuevos instrumentos meteorológicos, que parecían un excelente medio para predecir el tiempo según los postulados del método científico defendidos en los años 1620 y 1630 por una nueva clase de filósofos (como Francis Bacon y René Descartes), despertaron extraordinario interés.

¿PUDISTE CONSTRUIR TU TANGRAM?

Si todavía no lo hiciste o no te saliò bien acà va un poco de ayuda, además algo de informaciòn sobre este milenario juego que sirve para apreder matemàtica.

¿Qué es un TANGRAM?
El Tangram es un juego chino muy antiguo llamado Chi Chiao Pan, que significa tabla de la sabiduría. El puzzle consta de siete piezas o "tans" que salen de cortar un cuadrado en cinco triangulos de diferentes formas, un cuadrado y un trapecio. El juego consiste en usar todas las piezas para construir diferentes formas. Aunque originalmente estaban catalogadas tan solo algunos cientos de formas, hoy día existen más de 10.000.


Construir Tangram
Las figuras elementales del tangram nacen de una división del cuadrado, La división del cuadrado es la siguiente




Con el tangram se pueden realizar distintas figuras geométricas. Así como realizar distintas operaciones para construir una figura.

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